[Primeras Impresiones] Mob Psycho 100 III (Season 3)

• Título: Mob Psycho 100 III
• Capítulos: 4 / 12
• Géneros: acción, comedia, sobrenatural

Shigeo Kageyama (alias Mob) es un estudiante de secundaria que desea vivir una adolescencia normal. Sin embargo, él es diferente a los demás chicos de su edad porque posee poderes especiales… ¡¡Poderes psíquicos!! Desde pequeño que posee la habilidad de doblar cucharas y mover cosas con la mente, pero decidió ocultar sus poderes para no llamar la atención viendo la mala reacción que provocaba en la gente. Ahora, lo único que le interesa es hacerse amigo (o algo más) de Tsubomi, una compañera de instituto. Con la ayuda de su “mentor psíquico” -que ni siquiera tiene poderes-, seguirá con su vida cotidiana intentando cumplir su sueño.

A falta de un cierre, habré visto las temporadas anteriores de Mob Psycho 100 (primera sobre todo) más veces de las que estoy dispuesto a contar. Pero tras una espera de seis años, la adaptación animada comienza su recorrido final con una tercera (y entendemos que última) dispuesta a concluir una de las historias que, a título personal, más me han llegado a motivar.

Ya no sólo por las escenas de acción que se suceden cada poco con tanto batallón psíquico intentando controlar el mundo; el trabajo de producción es encomiable y estoy seguro de que hay gente con más formación que yo dispuesta a desgranarlo como se merece. También por esos momentos más de descanso, transición o comienzo de temporada, como es perfectamente este primer capítulo cargado de muchas emociones, decisiones personales, transiciones, puntos de inflexión, y por qué no, locus de control.

Y es que aunque prefiero no entrar en detalles para salvaguardar la sorpresa (que se vea si no mi intención de limitarme a ilustrar el post con capturas del opening, que no del capítulo en sí) de este primer episodio, la travesía de Mob como psíquico y persona es la clave de su obra.

Una que, incluso en su formato original, ha calado en quienes le han dado la oportunidad pese a no contar con las bonanzas de Bones ni la asistencia de Murata en lo visual.

Porque su historia, poderes psíquicos aparte, es la de cualquier adolescente (e incluso adulto, véase aquí a un servidor) de mundo contemporáneo que busca cambiar, encontrar su lugar en el mundo, aquello que significa felicidad, ser asertivo, declararse a la chica que le gusta, buscarse un oficio, entre un largo etcétera de fines y objetivos que nos mantienen mejorándonos en el día a día.

Para mí, Mob Psycho 100 es una obra con mucho significado. Pero implícito en el subtexto. No resulta densa, ni filosófica. Igual que a veces se lucha por proteger a quienes nos importan, en otros casos el destrozo de turno viene a cuenta de debates más esencialistas: la lucha por demostrar que no estamos determinados, que podemos cambiar, y que estamos cambiando. Algo de lo que va esta tercera temporada. Algo que, al menos en sus primeros compases, se hace muy patente desde la perspectiva de Reigen, Hoyuelo, y cualquier otro personaje o persona que lleve acompañando a Mob desde sus inicios.