[Primeras Impresiones] Mob Psycho 100 II (Season 2)

Primeras Impresiones

Desde que vi la primera temporada de Mob Psycho 100 allá por Navidades de 2016, y ante la ausencia de una secuela, no saltar al manga fue poco menos que una odisea. Sobre todo una vez este se encontraba terminado y con ello la historia al completo, lista para devorar en nada más y nada menos que su formato original, estaba disponible para hincarle el diente.

Sabía que gran parte del entretenimiento que la obra me proporcionaba venía del increíble apartado artístico y técnico de la adaptación, de ahí que realizase un esfuerzo sobrehumano (considerando que ni siquiera había garantías de una continuación) para aguantarme las ganas de acudir al manga de ONE. Mentiría de no admitir que el truco radicaba en comparar el arte de un medio con otro para disuadir las ganas de no esperar a la que, ahora sí, se encuentra en emisión: Mob Psycho 100 II, su segunda temporada. Una segunda temporada que si me permitís, comienza realmente bien.

Mob Psycho Arte

La dosis de acción de los seis minutos previos al opening está bien, y es casi un recordatorio de lo que vinimos a ver y hace de Mob Psycho una serie absurdamente divertida. Pero la guinda del pastel reside en la parte más calmada y sentimental que consolida un comienzo tan bien medido como trascendental.

Tras casi perder el control en la incursión a la base de Garra, Mob está más decidido que nunca a cambiar. Esto se traduce en aceptar sus poderes como parte de sí y no verse privado de la felicidad de la que todos a su alrededor parecen gozar. Ser uno más sin necesidad de abandonar las cualidades que lo hacen ser quien es, un chico introvertido y honesto cuya mayor virtud no es el tener poderes psíquicos capaces de poner el mundo patas arriba, sino la consideración que profesa para con los demás así como la voluntad de darle importancia a sus sentimientos y cambiar.

Roma no se construyó en un día, y del mismo modo Shigeo no se presenta a las elecciones a presidente por cuenta propia, sino más bien influencia de un externo que intenta convertirle en un líder nato. Pero, y obviando que el mero hecho de subirse al podio en un intento de superar su incapacidad ya involucra cierto esfuerzo y valor, el hito no es lo que viene antes sino lo que vino después.

Mob Psycho 100 II

Quedarse en blanco a la hora de dar el discurso al que tanto ensayo había dedicado fue un duro golpe para Mob, pero lejos de sumirse en la tristeza su trabajo duro se vio recompensado con la declaración por parte de una chica (y esta vez de las de verdad, que no un pandillero buscapeleas) que parecía apreciar el coraje del susodicho.

Como cualquier otro adolescente, se siente halagado por que alguien del sexo de su preferencia sienta interés hacia su persona. Pero más allá de eso, lo que obtiene Mob y es causa de su alegría no es otra cosa que el ser valorado; que a pesar de todo su esfuerzo no haya acabado en fracaso, sino le haya conducido a conocer a una persona con la que parece congeniar y de cuya compañía parece disfrutar.  

mob psycho 100 II primeras impresiones

Hace no mucho (y véase la disolución de la secta de Hoyuelo como ejemplo) sacar a relucir los sentimientos de Shigeo era sinónimo de que este perdiese el control y arrasase con el lugar, pero lo de ahora no tiene nada que ver. Sin ser la antítesis lo uno del otro, Mob llora, sonríe, se sonroja, disfruta del momento, valora el tiempo pasado y las emociones que de ahí han derivado. Es la primera vez que ante una situación de máxima ansiedad Mob no está por la labor de estallar y en consecuencia sus poderes no conducen a la destrucción, sino a la reparación de aquello que para él es de relevancia. Sus poderes, los poderes de Mob, brillan como la vida misma.

Publicar un comentario

0 Comentarios